El CFO moderno: cómo ha evolucionado su rol

Los directores financieros son parte del equipo directivo, quiénes deciden la dirección estratégica de la empresa. Para tener éxito, debe tener una gran capacidad de liderazgo, ser un gran comunicador y tener un amplio y a la vez minucioso conocimiento sobre finanzas.

Como miembro de la C-suite, es una de las personas más influyentes dentro de la empresa y también uno de los perfiles mejor pagados.

Pero ¿qué hace un director financiero en la actualidad?

Un director financiero (CFO) es un alto ejecutivo de una empresa, su responsabilidad principal es gestionar todos los aspectos financieros de la misma. El CFO suele depender directamente del Consejero Delegado y a veces forma parte del Consejo de Administración de la empresa.

Es responsable de la salud financiera de una empresa y de su rendimiento en el mercado. Esto implica saber gestionar con éxito el equipo financiero y asegurarse de que emplean su tiempo eficazmente para apoyar el crecimiento de la empresa.

En una encuesta de Harvard Business Review Analytic Services en asociación con Payhawk, el 67% de los directivos de empresas afirmaron que los departamentos financieros suelen dedicar la mayor parte del tiempo a la búsqueda de recibos y gastos (aun pudiendo automatizar fácilmente este tipo de trabajo con la tecnología adecuada).

Definitivamente los directores financieros modernos deben centrarse en impulsar iniciativas e introducir tecnología para ayudar al equipo financiero a alcanzar los objetivos empresariales, en lugar de gestionar manualmente los gastos.

Algunas de las funciones más comunes de los directores financieros son:

• Gestionar las finanzas de la empresa y supervisar al equipo de contabilidad
• Controlar los flujos de caja y gestionar los niveles de endeudamiento
• Elaborar presupuestos y previsiones de crecimiento
• Colaborar estrechamente con los directivos de todos los departamentos para garantizar que éstos funcionan eficientemente
• Presentar la información financiera tanto a las partes interesadas como a los inversores
• Analizar las tendencias financieras para identificar oportunidades y riesgos
• Coordinarse con otros departamentos para apoyar la toma de decisiones

Educación y requisitos para ser un buen CFO en la actualidad

El rol del Director Financiero ha pasado de gestionar funciones puramente financieras y contables (como ocurría hace unos años) a ser un socio estratégico para impulsar el crecimiento de la empresa. En la actualidad es responsable de impulsar la innovación en la empresa y de garantizar que ésta cumpla sus objetivos estratégicos. Además supervisar las funciones financieras y contables.

Formación requerida

Un candidato cualificado debe tener un grado en contabilidad o finanzas y años de experiencia en estos campos. Muchos candidatos también tendrán un máster en administración de empresas (MBA) o algún máster parecido.

Competencias y experiencia

El candidato ideal contará con ciertas aptitudes como pueden ser:

1. Conocimientos de gestión financiera: amplios conocimientos de los mercados financieros (inversiones, valoración, gestión de riesgos…)
2. Gran capacidad de análisis: Debe ser capaz de analizar la información financiera con rapidez para tomar decisiones basadas en datos y no en suposiciones. Se han creado más datos en los últimos 5 años que en toda la historia. Por ello es esencial que el director financiero esté familiarizado con las data-driven decisions (decisiones basadas en datos).
3. Perspicacia empresarial: Debe comprender cómo las finanzas pueden impulsar el crecimiento de la empresa aportando información sobre los planes y las previsiones financieras, sin olvidar el rendimiento operativo.
4. Pensamiento estratégico: Debe tener la capacidad de identificar oportunidades de crecimiento a través de la innovación y el cambio.
5. Habilidades de comunicación: Su puesto en la junta requiere de habilidades de comunicación verbal y escrita, son fundamentales para comunicarse con todos los niveles de una organización.

El Director Financiero moderno: más allá de los números

El trabajo de un director financiero (CFO) ha cambiado significativamente en los últimos años. Tanto la tecnología como la internacionalización de los mercados han revolucionado el funcionamiento de la empresa, haciendo que la eficiencia sea más alcanzable y también más sofisticada.

Aunque los directores financieros siguen dirigiendo equipos de personas que, a su vez, gestionan las finanzas y se aseguran de que el dinero se invierta de manera sensata, ahora tienen más responsabilidades.

Por ejemplo:

1. A la hora de gestionar y resolver problemas complejos, deben tener un enfoque estratégico que requiere tanto de creatividad (innovación) como de previsión.
2. Capacidad de liderar y gestionar una gran organización que sigue en constante crecimiento.
3. Estar alineados y coordinados con la estrategia empresarial. Ellos deben estar al corriente del entorno empresarial, los mercados financieros, los competidores y también del estado de los clientes.
4. Compromiso total tanto con los clientes como con las personas. Deben entender qué les mueve (cuáles son sus motivaciones, necesidades y aspiraciones) para así poder crear relaciones y vínculos beneficiosos para ambos.

En resumidas cuentas el director financiero de hoy debe tener un profundo conocimiento de las finanzas y ser un excelente estratega capaz de tomar decisiones basadas en información procedente de toda la organización, no sólo del departamento financiero.

El liderazgo que guía el crecimiento empresarial

Aunque la función de director financiero se asocia a menudo con los números y las finanzas, su importancia ha aumentado a medida que las empresas se han expandido globalmente y han ido más allá de sus mercados locales. El auge de la tecnología ha cambiado la forma en la que las empresas operan y toman decisiones a todos los niveles, incluido el nivel ejecutivo.

El CFO moderno debe mostrar habilidades de liderazgo cuando gestiona una organización grande y, además, en crecimiento. Estas habilidades incluyen la comunicación eficaz, la ejecución estratégica, la resolución de problemas y la gestión eficaz de equipos.
También debe ser capaz de construir y mantener relaciones con inversores y otras partes interesadas para conseguir un objetivo común.

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