Entregar tarjetas para tener un mayor control
Las tarjetas de Payhawk ofrecen configuraciones a medida: presupuestos individuales o por equipo, cantidad de gasto máxima por día, cantidad máxima por transacción, flujos de aprobación personalizados de varios niveles,...
Adrià decidió emitir tarjetas poco a poco, según nos cuenta “es nuestra responsabilidad verificar que los filtros que hemos dibujado para el uso de las tarjetas y para cumplir las políticas de gasto de la empresa son los adecuados. Nos hemos tomado la creación de estos filtros con mucha responsabilidad, evaluando todo tipo de contingencias y escenarios. Quizás el proceso haya sido más lento (poc a poc i bona lletra, como decimos en Cataluña), nos aseguramos de hacerlo bien. Después, como decía antes, podemos replicarlo y llevarlo a gran escala”.
Para el director financiero de VICIO y su equipo, el control lo es todo. “Sin la trazabilidad de Payhawk, no tendría el gasto bajo control y lo que no lo tengo controlado se me puede escapar y, lo que se me escapa, puede suponer un riesgo para la empresa. El control también nos ayuda a evaluar la rentabilidad de todo lo que hacemos, a ser mejores. No queremos controlar a las personas, contamos con un gran equipo lleno de profesionales y conocen de sobra las políticas de gasto de la empresa. Queremos controlar los números para anticiparnos y poner el foco en lo que verdaderamente importa en cada momento”.
La configuración de las tarjetas de Payhawk puede modificarse en todo momento y el cambio se realiza al instante. Se pueden solicitar fondos o congelar tarjetas a golpe de clic y eso, innegablemente, da mucha tranquilidad. Porque una vez que has gastado dinero en algo no se puede recuperar.
Por último, pero no por ello menos importante, “la herramienta Payhawk en sí es muy cómoda, está muy lograda. La usabilidad es excepcional y eso nos facilita el trabajo” confiesa el CFO de VICIO.
Valorando el tiempo y el conocimiento del equipo
“Valoro demasiado mi tiempo y, por ende, también el de los demás. Por eso no concibo que una persona en el equipo pase la gran parte de su jornada laboral introduciendo datos de forma manual en el sistema. Aparte de ser una tarea aburrida, es muy “time-consuming” y puede dar pie a errores. Cometer errores es parte de la condición humana, eso es así, no puedo esperar lo contrario.
Sin embargo, la tecnología sigue órdenes, reglas y pautas y las replica constantemente. Las personas tienen la capacidad de pensar nuevas estrategias, nuevas posibilidades de ahorro, nuevas formas de aumentar la rentabilidad... Ahí está la zona de genialidad de mi equipo, ahí es donde quiero que inviertan el mayor número de horas posibles. Creemos en la automatización de procesos financieros, hemos sido testigo de todo lo que pueden hacer y no estamos dispuestos a renunciar a ellos".